20 de agosto de 2008

Mueve el capital a tu favor

Mueve el capital a tu favor

Por: Ximena Sanz


Prestado o tuyo, debes aprender a administrar y sacar el máximo provecho a tu dinero. Estos siete consejos te ayudarán.


Lo ideal es que cuando solicites un crédito sepas en qué vas a usarlo. Podrías invertirlo en la compra de materia prima o maquina ria o como capital para ampliar un local. Una vez concluido este paso, lo siguiente es que le saques el mayor provecho posible a esos recursos y los inviertas en incrementar tu productividad.
Para Santiago Macías, coordinador General del Comité Nacional de Productividad e Innovación Tecnológica (Compite), lo primero que tienes que hacer es administrar tus finanzas. ?Esa será la mejor estrategia para mover el capital a tu favor?, explica.
En tanto que José Luis Muñoz, de Evalúa -empresa enfocada a la evaluación de proyectos de inversión privados y públicos-, comenta que para maximizar el uso del dinero lo más recomendable es "meterlo" a la empresa. "Haz negocio dentro del negocio: compra más producto para vender o amplía el lugar", dice.
Ambos consultores recomiendan seguir estos siete consejos que te ayudarán en el proceso de elevar las proyecciones de tu negocio.


1. Si ya tienes varios créditos anteriores a cuestas, liquida aquellos que representen una carga financiera mayor a las condiciones con las que adquiriste el nuevo financiamiento. Esto te traerá beneficios en el flujo de efectivo.


2. Con base en el monto solicitado, planea la mejor forma de distribuirlo. Recuerda que una empresa está conformada por varias áreas que, probablemente, necesiten capital para volverse más eficientes.


3. Destina el financiamiento a actividades productivas. Olvídate de comprar la computadora más costosa o contratar el servicio de Internet de mayor velocidad. Prioriza las necesidades de tu empresa y cubre las más importantes con ese dinero.


4. Adquiere equipo que incremente el nivel de ventas o la velocidad de respuesta. Una buena opción es comprar software especializado en la administración de recursos o clientes. Otra buena inversión es costear un curso de ventas para tus trabajadores. Con esto elevarás los ingresos y, por lo tanto, serás más competitivo y rentable en el mercado.


5. Págale a tus proveedores. Muchas veces los empresarios no pueden llegar a acuerdos con los proveedores porque les deben. Por eso, ocupa ese crédito para saldar deudas y así recobrar tu derecho a negociar en condiciones que favorezcan a ambas partes. Saca ventaja y paga de contado tus compras de todo el año y obtén un descuento considerable.


6. Crea alianzas de compra con empresas similares o acércate a redes de negocio, incubadoras o cadenas productivas. Estas figuras de asesoría y financiamiento permiten el acceso a nuevos inversionistas potenciales, socios, expertos calificados, oportunidades de negocio, entre otros.


7. Optimiza tu inventario para que tengas una mayor movilización del capital. Con el capital que solicitaste bien podrías incrementar tu oferta, traer productos y servicios innovadores o apostarle al volumen de ventas. Piénsalo, verás que no es mala idea.


Invierte con cautela


Si bien es cierto que las adquisiciones que lleves acabo deben ser a favor de tu empresa, es importante evitar destinar el financiamiento a liquidar bienes de consumo. "El financiamiento más caro es aquel que no me generará ningún beneficio económico y, en cambio, me creará una carga financiera", señala Macías.
Un claro ejemplo de una mala decisión es comprar un automóvil para uno de los socios. El beneficio a la compañía será prácticamente nulo, ya que no genera la rentabilidad necesaria ni siquiera para pagarse por sí mismo. Por el contrario, si el vehículo se adquiere como equipo de reparto o transporte, éste será útil en la medida de la demanda de distribución y los beneficios serán tangibles y casi inmediatos.
Un último consejo
De acuerdo con José Luis Muñoz, aumentar la capacidad administrativa tiene un retorno rápido, reduce las probabilidades de pérdidas y, sobre todo, incrementa las posibilidades de mover el dinero a tu favor. Recuerda que el negocio se mueve gracias a la compra de materia prima, la posibilidad de venderla y el dinamismo que le des al capital porque, como dice el refrán: "El negocio está en hacer el negocio,
no en guardar el dinero".
Destina el financiamiento a actividades productivas. Olvídate de comprar la computadora más costosa o contratar el servicio de Internet de mayor velocidad.